El recuerdo que nos dejó Fangio cuando el argentino tuvo que necesitar los monoplazas de sus compañeros para ganar
La Fórmula 1 de los 50 era muy, muy distinta a la de hoy en día. Para ponernos en contexto, esta última temporada de la máxima categoría del automovilismo contó con 20 pilotos, mientras que en 1950 fueron 81. Las medidas de seguridad eran mucho menores, el número de carreras también era menor, pero sin duda, lo que más impacta, son sus reglas.
En el artículo de hoy, veremos a uno de los grandes pilotos de la historia que ganó campeonatos gracias a este vacío legal que ya no existe. El piloto en cuestión es Juan Manuel Fangio. Corría bajo la bandera de Argentina, fue pentacampeón de Fórmula 1 y ganó un poco más del 46% de las carreras en las que participó. De sus 52 carreras, ganó 24, aunque hablaremos de dos de ellas. Concretamente hablaremos del Gran Premio de Francia de 1951 y del Gran Premio de Argentina de 1956.
¿Qué tendrán en común estas dos carreras? A priori nada, una fue en el circuito de Reims-Gueux, la otra en Buenos Aires, hay 5 años de diferencia entre una y otra… Pero claro, la similitud está en los ganadores. En estos dos Grandes Premios ocurrió una efeméride: en ambos vieron a dos pilotos proclamarse ganadores, y con un mismo protagonista común.
GP de Francia de 1951
En el primero de ellos, el Gran Premio de Francia del 51. A 10 vueltas del final, Juan Manuel Fangio tuvo que parar en boxes para que el equipo (Alfa Romeo) le cambiara la bobina de alta tensión. Una vuelta más tarde, volvió a parar y ese coche tuvo que ser retirado. Con pocos segundos de diferencia, el coche de Ascari, uno de sus competidores, se paró por un problema en la caja de cambios. Ante esta oportunidad, Fagioli entró a reponer combustible y el equipo ordenó al italiano que le cediera su coche a Fangio, algo que enfureció a Fagioli. Tras este cambio, el Chueco Fangio terminó ganando la carrera, aunque los puntos fueron repartidos entre él y su compañero de equipo (4 para Fagioli y 5 para Fangio, por hacer la vuelta rápida). Esta fue la primera de las 3 ocasiones en las que dos pilotos ganaron la misma carrera.
GP de Argentina de 1956
El guion del GP de Argentina del 56 era similar. Ese año, Fangio pilotaba para la Scuderia Ferrari, mientras que su gran rival, Stirling Moss, era el líder en la pista del equipo Maserati. Todo parecía ir viento en popa para Fangio, ya que hizo la pole a más de dos segundos del segundo. Lo improbable fue exactamente lo que sucedió, Menditéguy y Stirling Moss (pilotos de Maserati) lideraban el grupo en los primeros giros. En la vuelta 30, Fangio tuvo un problema con la bomba de combustible, y el equipo optó por intercambiar los coches con su compañero de equipo Luigi Musso, que iba en quinta posición.
Fangio estaba en una intensa batalla con Jean Behra por la cuarta posición cuando la suerte le sonrió. Entre las vueltas 40 y 43, Castellotti, que ocupaba la tercera posición, abandonó por un problema en la caja de cambios, Menditéguy que era el líder tuvo que abandonar por una rotura del eje de transmisión y, para colmo, el motor del nuevo líder, Stirling Moss, empezó a echar humo. Cuando parecía que la fortuna de Fangio no podía ser mayor, su único adversario con posibilidades, Behra, trompeó al final de la carrera, sirviendo a Fangio la victoria en bandeja.
El Maestro siempre perdurará en la memoria de todos los aficionados a la Fórmula 1, siempre será recordado como uno de los más grandes, entre otras cosas, por estas hazañas.
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